miércoles, 10 de noviembre de 2004

Hasta el lunes

Hoy me voy a Santiago de Compostela. Motivos laborales, pero no me hace demasiada ilusión. Al final, siempre que acabo yendo de viaje, por mucho que me paguen los gastos, me cuesta más que si me quedo en casa. Soy tonto....
...

Con respecto de mi declaración de intenciones, ya voy incumpliendo cierto términos. Habrá que estar más atento.

Y hoy tengo la cabeza un poco vacía. Los viajes no me sientan nada. Sigo con mis pensamientos, de que estoy en un fracaso tras otro. Quizá esto no le parezca tal a quien ve los toros desde la barrera, pero para mí, que aspiraba a algunas cosas indeterminadas, esto me sabe a derrota y a fracaso. Sólo sé que donde estoy no es donde quería estar. A lo mejor es porque estoy en Ítaca.

Si os habéis dado cuenta, ya no hablo de la radio. Sigue ahí, como Chechenia, una guerra enquistada, en estado estacionario. Sigo haciendo mis movimientos, pero ahora estoy, de manera intencionada, en compás de espera. No obstante, sé de buena tinta que esto no va a acabar bien.

No hay comentarios: